Discurso Boda

El pasado 3 de agosto, tuve el honor de pronunciar unas palabras en la boda de unos amigos (nombres en clave: Paleño e IP fija).

Para ponerlas en su contexto, he de decir que la boda fue celebrada en una playa de Málaga, en un barrio marinero llamado "El Palo". Me gustaría compartirlas con todos vosotros:



Buenas tardes, soy amigo del novio,o al menos lo era hasta ahora, y voy a dedicar unas palabras a los contrayentes.
Hoy tres de agosto es un día especial para vosotros, porque os casáis. Esto ya sería suficiente motivo, pero además, este entorno tan marinero que habéis elegido para vuestra boda me recuerda que, casualmente, tal día como hoy hace quinientos y pico años un tal Cristóbal, de apellido Colón, estaba en una situación similar a la vuestra.
Imaginaos:

• Tres de agosto de mil cuatro cientos noventa y dos.
• Él estaba en el puerto de Palos de la Frontera, nosotros estamos en la frontera con el Palo.
• Cristóbal Colón, mirando a la mar, como vosotros, a punto de embarcarse en una aventura que cambiaría su vida para siempre. 
• Él, apadrinado por los reyes Católicos, vosotros por vuestros padres, tanto monta, monta tanto.
• A su lado, un Fraile de la Rábida.... le ha tocado señor letrado.
• A su alrededor también se encontraban familiares y amigos, de punta en blanco, deseándole lo mejor, pero pensando para sus adentros "no tiene ni idea de donde se mete".
Y Cristóbal Colón, allí, aguantando el tirón, como vosotros, con los sudores cayéndole por la frente pero con su mejor sonrisa, empezando a sospechar que todo no iba a ser tan fácil como le habían contado.


Todas estas similitudes, lejos de desanimaros quiero que sirvan para daros un mensaje positivo. Porque en este viaje que vais a comenzar, el del matrimonio, al igual que el que hizo en su día nuestro amigo Cristóbal, vais a tener momentos buenos, no tan buenos y regulares. Como en ese momento crucial de la historia, en el que faltaban las provisiones, los marineros estaban a punto de amotinarse y el impulso del viento era mas bien escaso, y mandaron a Rodrigo de Triana a la canastilla situada en la parte superior del palo mayor. Este hombre divisó tierra y por lo tanto el fin de sus problemas.


Tengo que aclarar que dicha canastilla a la que mandaron a Rodrigo, recibe el nombre de Carajo. Así que, como consejo final de la historia, si me lo permitís, he de deciros que si en algún momento de este viaje que vais a comenzar, pensáis que todo va mal, que todo son problemas y que no vais a llegar a ningún sitio, mandad a quién haga alta al carajo, menos el uno al otro, y llegareis a buen puerto.

Actualización: Consejos para un discurso de Bodas
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