Aunque para mi madre (
la Chari) soy muy guapo, como a todo buen macho heterosexual en lo que viene siendo la media española de belleza, me han dado varias veces calabazas en mi vida.
Para el que no sepa lo que significa la expresión, dar calabazas a alguien significa dar una contestación negativa a una proposición u ofrecimiento. La expresión obtiene su máximo esplendor cuando ese ofrecimiento es amoroso y/o sexual. Por otro lado, también tiene el significado de suspender a alguien en un examen.
Obviamente se trata de un modismo, de una frase cuyo significado figurado es diferente al literal, como otras que hemos visto anteriormente:
Pero, ¿de dónde viene la expresión?. Y como no lo sabía, me puse a investigar.
Por lo visto, en la antigua Grecia se consideraba que la calabaza tenía propiedades anafrodisíacas, es decir, todo lo contraria a las afrodisíacas. Vamos, que era el equivalente a pensar en
Carmen de Mairena haciéndote un examen prostático/ginecológico mientras realizas el acto sexual.
En la edad media, el clero, en su afán de evitar que los pobres creyentes cayeran en la tentación carnal, recomendaban comer pipas de calabazas durante el rezo. De hecho, pensaban que esto ayudaba a mantener el voto de castidad.
Así, la próxima vez que os den calabazas podéis... no se... comeos unas pipas de calabazas.